viernes, 2 de octubre de 2009
viernes, 7 de agosto de 2009
jueves, 6 de agosto de 2009
jueves, 30 de julio de 2009
Tras el cristal, el mundo
Inesperada composicón hecha con tapes de botellas ocupan una pared de muchas , ya vacías. Otras con contenidos más propios de tienda de muebles, camas, sillas, objetos de la casa, por cierto con buen aspecto.
Extraño mapa-mundi de sólo un continente notable con pequeñas islas flotando alrededor. Pangea formada de circulitos como algún mapa significativo con esquemas, retícula dibujada con juguetes improvisados. Colorida composición hecha con tapes de botellas, ausencia de la forma principal del concepto BOTELLA y por extensión del momento festivo de la cocacola fresca, del momento de cambio regenerador de la limpieza de la casa, la reunión con vino y gaseosa de la afirmación de la vida existente del trago de agua.
domingo, 26 de julio de 2009
Desencuentros con la 3º fase
Ayer mismo un sujeto de esta edad en pleno estado de descomposición ,(por el olor lo supuse), plantó la mirada perdida enfocando fijamente a una joven de buen ver, haciéndole el viaje de lo más placentero. Y es que hasta en lo más humano y natural patinan como un cerdo sobre el hielo.
Estar en paz con uno mismo es recomendable en cualquier momento, pero a cierta edad, la amenaza de la bicha y el abandono puede crear estos monstruos. Una energía se les reconcentra en los días interminables que están en casa haciendo ricos a los programas de televisión más infames. No les ha llamado ningún hijo en mucho tiempo así que :-voy a salir a la calle a ver obras, y voy a buscar un culpable de mi próstata, del paro, de lo poco que me queda de pensión y de lo que queda para semana santa y lo voy a asesinar. Ésto no le curará pero por un rato se creerá en posesión de los dones que les fueron desposeídos. Nada que hacer amigo, esto es ya una cuenta atrás. Y no eres un vampiro, al menos en este sentido, y las vidas de los demás no te harán rejuvenecer.


Se ha dado un hecho peculiar sin ir muy lejos, justo en mi bloque. Una pandilla de ociosos abuelos se sentaba en un banco que mira la entrada de mi portal a 2 metros. SE reunían allí todos los días a todas horas. En ningún caso preferían los bancos del parque que les trajera ,tal vez, recuerdos de la naturaleza allá en su pueblo. Sabían quién iba y venía , ´te decián no llames que tal o cual a ido a tal sitio. Oscultaban qué traías o dejabas. Los llamamos cariñosamente los vigilantes de la playa.
Ahora mi calle está en obras para poner un nuevo rodapiés. (200.000€) desconozco donde han ido , pero el caso es que mi comunidad, asociación espontánea, ha recogido firmas con gran éxito para que no vuelvan a poner los bancos y llevado a la junta de distrito. Los ejércitos de la vida y la muerte se van a ver las caras en un nuevo campo de batalla. Cual será el veredicto? Próximo capítulo en tu casa.
Visita al babel
Negocio una consumición y el Heraldo, cuando algo en mi interior me dice que tengo que ir al retrete.
El sendero q lleva del bar a los baños está flanqueado a la derecha por un gran espejo y a la izquierda por una lámina de metacrilato translucido donde aguarda una bella señorita, con el remedio médico que mitiga el ir y fluir desordenado de las cosas. Con una instantánea robaré el recuerdo de mi paso por ahí.
Ella me dijo : Su tabaco gracias, toma una de estas pastillitas azules y el camino a la orilla del río es al fondo a la izquierda. ----Gracias por su amabilidad---
(Tengo q preguntarle al río un par de cosas, será un intercambio cultural.)
Contemplo la ausencia d esplendor del water, nada q ver con el de las madres pero asombrado descubro un mural, a la espalda del que sienta a contemplar el orden fisiológico de las cosas. Se trata de brochazos de naturaleza creciendo sin orden, desde el punto de vista de un paisajista del ayuntamiento pero con una gracia compositiva propia de los sabios orientales del pincel y el junco.
La cámara juega al gato y al ratón con la luz, y vira los colores a su gusto, con lo q no queda, unido a mi mala memoria, mas que un suave reflejo RGB acariciado por la brisa de la maleza de las baldosas.
Por la oscuridad de los ríos
estuve vagando.
Viví mi vida
en Babilonia
La naturaleza nació entre las baldosas, como la maleza en un jardín público, con las tijeras de Damocles mirando el reloj. Pero debe ser que la vida crece donde menos te lo esperas. Crece en lugares infrecuentes y alli donde se celebran sus erráticas caricaturas sólo se advierte una parte del intercambio.
Por la oscuridad de los ríos
sentí pánico,
pertenecí por fin
a Babilonia

Hay algo digno de ser visto en las galerías de arte zaragozanas. Son los cuartos de baño. Pensados para sus trabajadores, cuando entras sabes perfectamente que les has pillado por sorpresa. Indicios de vida de sus habitantes habituales productos y herramientas, restos de vida, premio al paseante sediento.